Bijuesca
(Texto parcialmente reproducido de la obra Cultura popular de la Comunidad de Calatayud, escrita por José Ángel Urzay Barrios, y publicada en Calatayud por el Centro de Estudios Bilbilitanos y la Comarca Comunidad de Calatayud, en 2006.)
El extenso castillo de Bijuesca, en el que aún se aprecian tres recintos, ocupa una posición dominante en un espolón rocoso sobre un meandro del Manubles.
La ermita de la Virgen del Castillo, de piedra sillar y mampostería, consta de una sola nave sin crucero, con pórtico a la entrada. Su torre cuadrada y almenada formaba parte del conjunto defensivo. Contaba con una santera, cuya vivienda estaba en la torre de la ermita, de forma que el templo estaba siempre abierto para quien deseara visitar a la Virgen. Cuando salía una vez a la semana para pedir comida, la gente le daba pan, huevos o lo que tenía por casa. La santera tocaba el campanillo por la mañana y por la tarde. Este último toque de la tarde, la campana de los perdidos, era importante para que en el caso de niebla o de nieve los pastores tuviesen una referencia y no se perdiesen.
Como la imagen de la Virgen fue robada hace años, fue necesario esculpir una nueva. Además de esta, los bijuescanos guardan celosamente la Virgen de la Piedra, de alabastro, que consideran como la original y primitiva. Era tradición que las mozas levantasen a pulso esta imagen y se la pusieran encima de la cabeza, acción premonitoria de que iban a encontrar marido. Los recién casados iban a ofrecer su matrimonio a la ermita y también la primera salida de la madre con el recién nacido era hasta allí. Los Gozos a la Virgen eran cantados por los hombres, mientras que las mujeres entonaban únicamente el estribillo.
La plaza del pueblo es magnífica, limitada por su frontón, la iglesia y el sólido edificio de las escuelas, reconvertido en ayuntamiento.
La iglesia de San Miguel, del siglo XVII, conserva elementos románicos en su ábside y en alguna ventana.
De las ermitas que se levantaron en el término de Bijuesca sólo quedan ruinas: la de Santa Juliana, en la vega, en dirección hacia Torrijo de la Cañada; la de San Juan, en el término que lleva su nombre, encima de la fuente de la Teja; la de San Jorge, en un alto; la de Santa María, en el camino vecinal de Torrijo y Carabantes; la de la Virgen del Rosario, en la Hontecilla, limitando con Carabantes y La Alameda. Cuando se volvía de romería desde la ermita hacia el pueblo, era costumbre que cada romero cogiese una o varias piedras y las echase a un montón, que todavía es reconocible.
La Fuente de los Caños suscita siempre debates sobre su número de caños, 28 para casi todos y 26, incluso 24, para algunos, según como se cuenten, aunque damos fe de que hemos contado los 28, dos de los cuales son difíciles de ver. Es la fuente más notable de la Comunidad de Calatayud. La propia fuente sirve de abrevadero para las caballerías y su agua va a parar a dos lavaderos, uno de ellos cubierto.
Un poco más abajo nos topamos con el bello puente del Molino de los Caños, formado por un arco de piedra de sillería. La tosca y firme mampostería de la obra ha resistido increíblemente el paso del tiempo y las fuertes avenidas del Manubles.
Se conservan restos de una nevera en la Umbría de la Nevera, entre la cuesta del Rosario y la de Deza, y también de un palomar.
En el término municipal se alza el Mojón de los Tres Obispos, un trifinio, pues mojan en sus inmediaciones tres términos municipales, Deza, La Alameda y Bijuesca, pertenecientes a tres diócesis: Sigüenza, Burgo de Osma y Tarazona. Cerca estaba la famosa venta de Tanas.
Bijuesca ha sido siempre un pueblo ganadero y conservó hasta bien entrado el siglo XX numerosas costumbres relacionadas con el cuidado del ganado y de las caballerías. Mantiene varias vías pecuarias. Desde Beratón bajaban a invernar durante varios meses ganados de cabras a las dehesas particulares de Bijuesca. Venía el pastor, a veces acompañado por su familia, para pasar todo el invierno en las parideras.
Ha sido siempre una localidad muy vinculada a los pueblos castellanos cercanos. Cuando bajaban a moler trigo a la fábrica de harinas, jugaban mucho a la pelota en el frontón con los de Bijuesca, donde ha habido siempre buenos jugadores. Toda esta zona está en el límite con Castilla y ello se nota en múltiples aspectos. Por ejemplo, mientras que las cocinas de Bijuesca están en el primer piso de las viviendas tradicionales, en Berdejo algunas se ubican en el piso de abajo, y en Torrelapaja, todas.
Hubo en Bijuesca banda de música, formada por más de veinte miembros, que iba a pueblos cercanos como La Alameda o Carabantes. Fue fundada por mosen Jaime Miñana en los años 40 y duró unos quince años. Sus componentes tocaban y bailaban el ramo de las fiestas.
La Saca de la Virgen es un acontecimiento festivo excepcional, el más importante de toda la Comunidad de Calatayud y uno de los más singulares de España. La Saca es la salida de la Virgen de la ermita a la iglesia de Bijuesca y su retorno en el mismo día. Se celebra cada 25 años: la última vez tuvo lugar en el año 1996 y la próxima será en 2021. Queda constancia de que hubo sacas anteriores de la Virgen en los años 1896, 1946 y 1971. Si la saca no se celebra el año que corresponde, hay que esperar otros 25 años. No hay ninguna otra fiesta que se le parezca ni en número de asistentes , ni en emotividad, ni en intensidad. No es una celebración más, sino que tiene una significación muy especial para los bijuescanos y todos los pueblos de La Concordia (Reznos, Deza, Carabantes, Malanquilla, Clarés, Torrijo, Berdejo, Torrelapaja y La Alameda), que la preparan con todo el cariño y cuidando hasta el último detalle. Confiamos en que podamos emocionarnos de nuevo con todos sus actos en 2021.